domingo, 11 de septiembre de 2016

COMENTARIO ELEISON Número CDLXXVIII (478) - 10 de septiembre de 2016

Eleison Comments by His Excellency Bishop Richard Williamson


Orígenes del Islam

¿Quién se beneficia promoviendo a los adversarios de Nuestro Señor?
Aquellos que sirven a Dios azotándonos con aflicciones.

Al recomendar a los lectores “Complot Contra la Iglesia” por Maurice Pinay, un libro que prueba con abundancia de documentos que el principal enemigo externo de la Iglesia Católica por 2000 años han sido los judíos, estos “Comentarios” declararon que los judíos estaban detrás del Islam, la Masonería y el Comunismo. 

Ningún lector impugnó que ellos estaban detrás de la Masonería y del Comunismo, pero unos pocos preguntaron qué es lo que demuestra que también estaban detrás del Islam. En realidad, ya que el Islam surgió en el siglo séptimo después de Cristo, no existe para éste nada como la documentación que existe para las raíces modernas de la Masonería y del Comunismo. Además, expertos en Islam dirán que incluso muchos documentos originales sobre el comienzo del Islam habrían sido destruidos, precisamente para ocultar sus verdaderos orígenes. Lo que nos queda aquí son el texto del Corán mismo y argumentos históricos que apuntan a los judíos como los que originaron el Islam.

En cuanto al texto del Corán, uno que lo estudió de cerca antes del Concilio, Hanna Zakarías, llegó a la conclusión en su libro “Verdadero Mahoma, Falso Corán” que éste fue totalmente trabajo de un Rabino judío. Para apoyar su tesis de que el Islam es simplemente el judaismo explicado a los Árabes por un Rabino para convertirlos al único Dios verdadero del Antiguo Testamento, Zakarías sostiene que no hay historia ni detalle en el Corán que no sean específicamente judíos, en referencia al Antiguo Testamento, al Talmud o a otra literatura judía. Solamente un judío, argumenta él, pudo haber glorificado tanto a Israel como lo hace el Corán, a la cabeza de las naciones, único receptor de la única Revelación del único Dios verdadero. Así, pasajes en el Corán honrando, por ejemplo, a Juan el Bautista y a la Santísima Virgen, los honran puramente como judíos, cortando toda conexión con la Cristiandad (Sura XIX, 1–21). En cuanto a Jesús, Él pudo haber sido el hijo de María pero ciertamente Él no fue el Hijo de Dios.

Por el contrario, un estudioso post-conciliar del Islam, Laurent Lagartempe, afirma en su libro “Orígenes del Islam” que hay muchas preguntas acerca de la persona histórica de Mahoma y él argumenta que el Corán es una mezcolanza de textos dispares, más o menos estabilizados apenas dos siglos después del comienzo del Islam, para justificar la nueva religión y para actuar como su texto sagrado para rivalizar con el Antiguo y Nuevo Testamentos de Moisés y Jesucristo, respectivamente. Pero Lagartempe no refuta una presencia significativa del judaísmo en el Corán ni su influencia.

En cuanto a los argumentos históricos sobre los judíos detrás del Islam, el libro de Pinay documenta el bien conocido papel jugado por los judíos en ayudar a los Árabes a conquistar la España católica entre 711 y 788, reconquistada por los Católicos solamente en 1492. Lagartempe supone razonablemente que la precedente conquista Árabe del Norte de África desde 647 hasta 710 fue también ayudada por los judíos, porque aquellos países al sur del Mediterráneo, alguna vez una floreciente parte del Cristianismo, han desde entonces permanecido mayormente bajo control árabe.

Sin embargo, tal vez el argumento principal sobre los judíos  detrás del Islam es de un orden más general, y difícilmente discutible, apoyado en el papel muy especial jugado en la historia por el pueblo del Mesías, Nuestro Señor Jesucristo. Para empezar, el entrenamiento dado por Dios a los israelitas para ese papel, se extendió a lo largo de 2,000 años desde Abraham hasta Cristo. Vean en el Antiguo Testamento cuán especialmente Dios los recompensaba tanto como los castigaba, para formarlos como la cuna del Mesías por venir. Eso les dio a los judíos una familiaridad muy especial con el único Dios verdadero y ellos nunca la perdieron totalmente desde entonces. Y esa familiaridad les da una habilidad especial para fabricar religiones sustitutas que parecen satisfacer las reales necesidades religiosas de los hombres.

Desgraciadamente, ellos rechazaron a su Mesías cuando Él vino, y ese rechazo les da una motivación especial para fabricar falsas religiones con el fin de arrastrar a los seres humanos lejos de Cristo y lejos de la salvación eterna. Aquí está el por qué Maurice Pinay puede mostrar cómo ellos han luchado a través de todos los siglos contra la Iglesia Católica. Hoy ellos están indiscutiblemente detrás de la invasión Musulmana de las que alguna vez fueron naciones católicas de Europa para disolver los últimos remanentes de la Fe y así lograr que esas naciones dejen de oponerse a su Nuevo Orden Mundial.

Kyrie eleison.